CUENTOS PENDIENTES
Escrito por: Nicolás Alvarado
Primero lo primero: decirles de donde tomé los incipits a partir de los cuales enviaron ustedes casi 40 minificciones, cosa que mucho me entusiasmó y estimuló:
- “Con fecha de hoy retiro de tu vida mis tropas de ocupación” proviene de “Armisticio”, cuento de Juan José Arreola (que, por cierto, es una minificción) incluido en Cantos del mal dolor.
- “Usted había hecho las cosas con tanta limpieza…” es el comienzo de “Puzzle”, cuento incluido en el apartado “Plagios y traducciones” del libro La otra orilla de Julio Cortázar.
- “En un día de verano, hace más de tres mil quinientos años…” inicia el cuento “La historia según Pao Cheng”, que figura en el libro Narda o el verano (que, por cierto, incluye también el extraordinario cuento homónimo) de Salvador Elizondo.
Ahora, a sus cuentos. Huelga decir que no encontré entre nosotros a un heredero de Arreola, de Cortázar o de Elizondo y que tampoco me lo esperaba: la idea del ejercicio fue siempre la mera diversión. Lo que en cambio si hallé aquí fueron cinco entradas que me llevaron, cuando menos, a sonreír con feliz sorpresa. Sin animo de menoscabar a los demás, se trata de las siguientes propuestas, en orden de publicación:
- El de Aleida Valero a partir de Cortázar resulta, en efecto, limpísimo y abre un universo de posibilidades a partir del horror cotidiano, del poder de la (mala) voluntad y de la culpa.
- El de Polia a partir de Elizondo me interesó por su juego acaso perverso con el estatuto del lector y, además, porque siempre da gusto conocer a otro devoto de T.S. Eliot.
- Del de Luis Mariano García a partir de Cortázar me sedujo que hilara la metáfora de la limpieza y que hiciera intervenir el inexorable hado del destino.
- Humberto Calderón Glez. mostró en su cuento a partir de Arreola que nunca nadie retira de nuestra vida sus tropas de ocupación, aun cuando se lo proponga.
- Y el de Luis Nieto a partir de Elizondo -el último que leí- es de un pesimismo y un fatalismo que me resultan sencillamente irresistibles.
Felicidades a ellos cinco. Ahora les propongo el ejercicio inverso: ¿qué tal que me proponen frases -mejor: oraciones, como bien me corrige Javier- y la próxima semana yo elijo la que más me guste y les entrego una minificción a partir de ella?
No hay comentarios:
Publicar un comentario